Olvida los tambores
(de Ana Diosdado)
Quemar el mundo antiguo,
que arda la ideología,
la ropa vieja
y la nueva política.
Arriba los corazones
que bailan en la hoguera,
mientras arden las mentiras
al ritmo de los tambores.
Veremos, con ojos nuevos,
como el sol nace de las cenizas.
Y volaremos hacia él,
como Dédalo,
Ícaro o Tony,
porque no nos deslumbra el sol
ni el fuego,
tan solo la galaxia.
Si algún día,
alzas la vista al cielo,
y ves a Júpiter brillando
no te olvides que soy yo:
calcinado como un astro.